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Como os comenté, no hice muchas, pero os cuelgo alguna para que no se diga. La crónica no sé si la escribiré o no. Ya veremos.

La primera en Saélices de la Sal. Guadalajara. Un lugar precioso.
En mitad de ninguna parte, camino de Molina de Aragón
Buscando una bombilla de recambio, que fue uno de los "problemas" que tuvimos. Compramos 4 por un euro.
Llegando al Trillero, con bastante calor, pero contentos de cerrar la primera etapa.
Preparando la salida para Sant Cugat. Se nos unió Fernando, procedente de Barcelona.
Valderobres. Un pueblo espectacular en la comarca de Matarraña.
Camino de Cataluña
El Ebro ... ¡y tanta pasta en Kawas para que la gente mire las Impalas!
Hay que tener cuidado al girar sobre gravilla con la moto cargada ...
Santis Creus. Una preciosidad de lugar.
El Biscúter híbrido de mi amigo Ramón. Powered by RM Lightning
Con Paco Mateo. No hay nadie que sepa más de Impalas ... y pocos de la vida.
El MCI no descuida un detalle.
El otro "problema" lo dio mi Impala 2: una tuerca de escape que se aflojó tras una paliza de carreteras rápidas.
Aliens en Castel de Cabra a la vuelta de Alcañiz camino de Molina. La luz de primera hora de la mañana es mágica.
Remedios clásicos contra el frío en Molina.
El impalero espontáneo al que nos encontramos por segundo año.
Última parada en Guadalajara para quitarnos capas de ropa a cuarenta minutos de Madrid.
Sé que son un poco incomprensibles para el que no lo haya vivido, pero a ver si con eso se nos anima Blasyo, que es un vasco impropio.

Gracias por la crónica, bonita aventura.

Sé que son un poco incomprensibles para el que no lo haya vivido, pero a ver si con eso se nos anima Blasyo, que es un vasco impropio.

Envidia ya me dais.Pero lo veo dificil.Un viaje de esos no se improvisa.

blasyo escribió:Envidia ya me dais.Pero lo veo dificil.Un viaje de esos no se improvisa.

Pues no creas que se planifica tanto, Blas. Es la quinta vez que vamos con las Impala a Barcelona y nos ha pasado de todo, empezando por un primer año donde nos cayó el diluvio universal.

Hoy día con un móvil llevas GPS y mapas, con lo que perderse es complicado. Y las Impala no se rompen si las cuidas bien y respetas su ritmo. Lo demás es una cuestión de calcular un poco, mirar Google Earth para ver cómo son las carreteras secundarias, reservar alojamientos ... y ¡disfrutarlo!

El primer año nos pareció "la aventura", y en cada Impalada hay gente que nos sigue mirando como si fuéramos unos enajenados, pero en cada Impalada lo sentimos como algo menos "extremo" porque sabemos lo fácil que resulta una vez metido en el lío. Son apenas 1.500 kilómetros en 4 días ... nada del otro jueves en realidad.

Y lo que tenemos cada vez más claro es que, mientras podamos, menos taller y más montar. Ya llegará el momento en que tengamos sólo la opción del taller.

Un vídeo de un tramo bonito cerca de Prat del Compte, en Tarragona.

Gracias por compartir la gran aventura. Un viaje muy chulo.
Saludos

¡Un placer!